.[Memorias turbias].

Hoy mis venas me gritaron más que en diciembre y es que el amor ya no cabe en mi cuerpo.

Me encuentro en mi café predilecto, aquél en el que la población llevan tonos blancos sobre la cabeza; escucho los sonidos de los cubiertos y una que otra sonrisa de algúna pareja que celebra un logro no inesperado. ¿Qué hago aquí?, si tu cuerpo esta lejos de mi, si tu boca envidiosa no me invita a morderla, si tu perfume no se adentra en mi piel.

Dame un día, sólo uno. Prometo que en mi lápida se podrá leer : " Quién amo hasta inventar un nuevo amor."
Calla, no me digas más...ya me amas.